Gracias a la ósmosis inversa, puede beber agua libre de casi todos los contaminantes.
En la naturaleza,la ósmosis es un fenómeno físico en el que el agua pasa espontáneamente de un medio con baja concentración de solutos a otro más concentrado. En nuestro cuerpo, por ejemplo, el agua circula para equilibrar la concentración de sales y nutrientes entre nuestras células y nuestra sangre.
La ósmosis inversa es exactamente lo contrario del fenómeno natural. Se aplica alta presión al agua contaminada para forzarla a atravesar una membrana semipermeable. Resultado: sólo pasan las moléculas de agua (H₂O), los contaminantes quedan atrapados.
La ósmosis inversa funciona jugando con la presión osmótica y la difusión de las moléculas a través de una membrana muy densa. Incluso las moléculas mucho más pequeñas que una bacteria quedan retenidas.
La membrana no es simplemente un "pequeño tamiz", es una estructura semipermeable que favorece el paso de ciertas moléculas (H₂O), pero bloquea otras en función del tamaño, la polaridad y, a veces, la carga eléctrica de las moléculas.
Un filtro convencional bloquea las cosas grandes. La membrana de ósmosis inversa es como una barrera molecular ultrafina que clasifica el agua a nivel molecular. Lo que está disuelto (como PFAS, nitratos o medicamentos) pasa a través de un filtro convencional, pero queda retenido por la ósmosis inversa.