Gracias a la ósmosis inversa, bebes agua libre de casi todos los contaminantes, pero esta purificación también elimina los minerales naturales. ¿Hay que volver a añadirlos?
El agua no es nuestra principal fuente de minerales.
La mayor parte del calcio, magnesio, potasio y sodio que consumimos procede de los alimentos. Por tanto, beber agua purificada no mineralizada no es perjudicial para la salud, siempre que se siga una dieta equilibrada.
Una dieta variada es todo lo que necesitas. El agua remineralizada es un plus, no un requisito.
Así es como los alimentos cubren nuestras necesidades:
No se preocupe si no remineraliza, el agua seguirá siendo pura, limpia y saludable, pero remineralizar significa más sabor, más comodidad y un pequeño impulso para la salud.